Alexis Monney (nacido en el 2000) se unió en 2024 a la familia de deportistas Longines. Hoy convertido en esquiador alpino de talento, se calzó los esquíes por primera vez a los dos años en su estación de deportes de invierno de origen, Les Paccots, en Suiza. Tras explorar varias disciplinas deportivas, a los 12 años se decantó por una dedicación plena al esquí alpino, con el apoyo de su padre Louis, monitor experimentado y exentrenador de un famoso esquiador suizo. Esta elección, combinada con un trabajo riguroso y constante, ha dado sus frutos. 

En diciembre de 2019 Alexis debuta en la Copa de Europa de la FIS, y unos meses más tarde se cuelga la medalla de oro en descenso en los Campeonatos del mundo junior de la FIS 2020 en Narvik (Noruega). 

Durante la temporada 2020/2021 se une al equipo nacional suizo y por primera vez se clasifica para la Copa del mundo. A partir de la temporada 2022/2023 logra los primeros resultados reseñables en pruebas míticas: 10º en Wengen, 11º en Kitzbühel y 18º en los Campeonatos del mundo de Courchevel-Méribel. 

En enero de 2024 confirma su potencial con un 12º puesto en Wengen y 20º en Kitzbühel. Tras lo cual, en diciembre de 2024, logra su primera victoria en descenso en las pistas de Bormio (Italia). A continuación enlaza con cuatro podios más en la Copa del mundo (en Super-G y en descenso), incluido un 2º puesto en la legendaria Streif de Kitzbühel. Su ascenso prosigue en los Campeonatos del mundo de Saalbach (Austria) en febrero de 2025, donde se alza con el bronce en descenso y con la plata en combinado alpino por equipos. 

En cuanto a la clasificación general de la Copa del mundo, da un salto impresionante al pasar del 60º puesto al 9º. Del mismo modo, se coloca en 8ª posición en la clasificación de Super-G, y 3ª en descenso.